martes, 6 de octubre de 2009

Comunidad Ayorea Degüi: territorio y vivienda.

Actualmente se estima que hay cerca de 640 ayoréode viviendo en la ciudad de Santa Cruz, es decir cerca del 16% de la población Ayoréode en Bolivia, calculada en 4000 personas. La Comunidad Ayorea Degüi, con 333 habitantes, absorbe a más de la mitad de la población ayorea urbana, sin embargo, ocupa el espacio más reducido, un terreno de 6180,77 Mts² en la ET – 36, séptimo anillo, Villa Primero de Mayo. La otra mitad se reparte más o menos equitativamente entre los asentamientos urbanos de Garay y Jogasui (Roca, Irene, "Los ayoréode en la ciudad de Santa Cruz". APCOB:2008).

La comunidad Degüi cumple cierto rol de centro social y cultural al concentrar a la mayoría de la población ayorea urbana, al ser la mejor equipada a nivel de infraestructura y la mejor comunicada a nivel de transporte. En sí, Degüi es el centro de reunión de los ayoreos que viven en la ciudad.

Al hablar de la comunidad Degüi podríamos hablar de una nueva identidad ayorea acuñada en la ciudad, donde sus habitantes muestran su faceta de adaptabilidad y plasticidad cultural que entra en juego para conservar una identidad renovada. Aún se aprecia y se conserva la lengua (el ayoreo) como símbolo de identidad y estrategia de relación y reagrupamiento social. En Degüi se está gestando una estrategia para preservar los valores y particularidades como pueblo indígena, en la búsqueda de la sostenibilidad de la vida urbana, entendida como una forma de vivir técnica, social, económica, cultural y ambientalmente viable,.

La comunidad Degüi presenta 52 viviendas, casi todas con una sola habitación multifuncional agrupadas según el parentesco de las familias. Las viviendas se construyen empleando la técnica del tabique. Este tipo de vivienda consta de un armazón de madera y ripilla cubierta con barro y paja, el techo es de calamina y casi todas carecen de ventanas. En un promedio de 3 años la vivienda se refacciona o se edifica de nuevo.

viernes, 25 de septiembre de 2009

Programa de educación para adultos


Con el apoyo de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia del Gobierno Municipal de Santa Cruz y en coordinación con la comunidad Degüi, a principios de la gestión 2008 se solicitó a la Dirección Distrital de Educación No. III la apertura de una unidad académica en la Comunidad Ayorea Degüi, como parte del Programa de Reinserción Escolar para los adolescentes y jóvenes abandonaron la escuela.

Se recalcó que era imperante que el Programa funcione en la comunidad para facilitar y promover el acceso de los habitantes a educación formal y evitar futuros casos de deserción escolar por factores de tiempo, dinero, trabajo o incompatibilidad con alumnos y profesores en el contexto del aula. Esta iniciativa fue respaldada por la Defensoría de la Niñez del Municipio y del Servicio Departamental de Gestión Social.

La gestión escolar 2009 se inicio con 32 alumnos y alumnas, atendidos por tres profesoras. Dos de ellas son normalistas dependientes del Centro Integrado San Francisco Javier. La tercera profesora, también normalista es parte del proyectos Ayoreos Urbanos de APCOB (Prof. Silvia Achipa), quien además realiza la coordinación con las profesoras, el Director del CISFJ, el alumnado y el proyecto. A la vez, ella presta especial atención a 4 adolescentes que dejaron de asistir a la UE Juana Degüi.

La currícula empleada corresponde al Programa de Educación de Jóvenes y Adultos del Viceministerio de Educación Alternativa. Este programa comprende todo el ciclo de primaria y se organiza en 9 módulos. Cada módulo trata un eje temático.

El avance de cada módulo es según el empeño del estudiante, destinando un promedio de 3 a 4 meses por módulo. Además del avance de los módulos, cada jueves, los alumnos y alumnas acceden a clases de primeros auxilios y salud pública a cargo de una enfermera. En lo posterior, de acuerdo a requerimiento de los alumnos, también se puede contar con profesores de mecánica o electricidad.

Los alumnos ya cuentan con su propia directiva y por propia iniciativa coordinan con sus profesoras para realizar actividades extraescolares, tales como conmemoraciones y celebraciones y ferias educativas. Los alumnos de la unidad académica participan en todos los eventos que organiza el Centro Integrado San Francisco como campeonatos deportivos y desfiles cívicos.

Capacitación contínua de docentes de la UE Juana Degüi


Conformado el equipo de docentes de la Unidad Educativa Intercultural Bilingüe Juana Degüi, a mediados de mayo del 2009 se realizó un taller de actualización y sensibilización sobre la cultura ayorea, la comunidad ayorea Degüi y la realidad de la niñez y adolescencia en la comunidad. En esta oportunidad, las profesoras ampliaron sus conocimientos para una mejor comprensión del grupo de niños y niñas y familias con quiénes trabajan, para así adaptar los contenidos y ritmos de trabajo.

Las profesoras pudieron intercambiar opiniones, sentimientos y expectativas sobre el trabajo en la UE Juana Degüi. Todas ellas coinciden en que la mayor limitante es el idioma, sobre todo en los primeros ciclos: primero y segundo de primaria. Actualmente las docentes están en etapa de conocer a los niños y niñas y a la comunidad, con el apoyo de la Prof. Silvia Achipa.

En abril del 2009, las 3 profesoras con las que inicialmente contaba la UE Juana Degüi, participaron en un Taller para conformar la Red de Educación Intercultural Bilingüe, organizado por el CEAM – CIDOB. Se contó con la participación de profesores de las Escuelas de Bilingües de comunidades indígenas de zona rurales y la UE Juana Degüi. Además participaron autoridades municipales y departamentales del área de educación. En esta oportunidad el plantel docente de la UE pudo establecer mejores relaciones de coordinación con la Dirección Municipal de Educación.

Certificados de nacimiento y reconocimiento de hijos para los menores de la Comunidad Degüi


En julio del 2009 se organizó una jornada para la tramitación de certificados de nacimiento en coordinación con una oficina de Registro Civil, tramitándose 26 certificados.

Con esta actividad, son 36 menores de 6 años cuentan con su certificado de nacimiento como requisito para ingresar en las estadísticas del Programa PIAN – 6 y de la UE Juana Degüi, además del bono Juana Azurduy para los menores de dos años. También se realizó el reconocimiento de hijos.

Centro de Desarrollo Infantil "Disabode Chaidí"


A partir de agosto del 2008, la comunidad Ayorea Degüi en coordinación con la institución APCOB, Aldeas Infantiles SOS, Programa PIAN-6 y la Misión Esperanza unieron esfuerzos para crear el Centro de Desarrollo Infantil Disabode Chaidí, con la implementación de un programa diferenciado y específico que mejore los niveles de nutrición de los menores de 6 años a través de un sistema de complementación alimentaria y desarrollo de sus funciones psicomotrices, cognitivas y afectivas, acorde a las necesidades de las niñas y niños, respetuoso de las formas culturales de la comunidad,

El Centro Disabode Chaidí funciona en un inmueble al interior de la Comunidad Degüi y cuenta con 3 aulas, cocina, dos batería de baños y duchas y área de parque infantil. Alrededor de 30 niños y niñas desde los 6 meses hasta los 6 años asisten al Centro de lunes a viernes y allí reciben 3 comidas al día, desayuno, merienda y almuerzo, realizan actividades pedagógicas de acuerdo al Diseño Curricular del Programa PIAN – 6, aprenden hábitos de higiene y se realiza el control de talla, peso y vacunas.

El plantel de educadoras se conforma por una docente de nivel inicial con ítem del Ministerio de Educación, dos educadoras locales y una responsable de cocina de la misma comunidad. En cuando a los alimentos, la defensoría de la Niñez y Adolescencia del Gobierno Municipal de Santa Cruz de la Sierra, provee los alimentos secos a partir de febrero del 2009. Los alimentos frescos, así como la compra de material escolar, didáctico y de higiene lo provee la institución APCOB gracias a cooperación de la agencia holandesa CORDAID. Aún está pendiente la asignación de becas trabajo para dos educadoras por parte de la Prefectura del Departamento.

http://www.eldeber.com.bo/2009/2009-04-13/vernotasantacruz.php?id=090412212904

La Unidad Educativa Intercultural Bilingüe Juana Degüi


La comunidad Degüi cuenta con la primera Escuela Intercultural Bilingüe (Castellano – Zamuco) Juana Degüi, la cual funciona en los niveles inicial y primaria. Esta institución se fundó en Julio del 2006 con el apoyo de la institución Apoyo Para el Campesino Indígena del Oriente Boliviano APCOB, en coordinación con el SEDUCA.

La UE Juana Degüi cuenta con Resolución Administrativa 2008/2006 otorgada por el Servicio Departamental de Educación SEDUCA y con Registro Único de Unidad Educativa RUE No. 81981396 del Sistema de Información Educativa SIE, otorgado por el Ministerio de Educación.

Concebida bajo un modelo de escuela comunal, su creación y funcionamiento fue el resultado de un proceso de construcción mutuo de contenidos curriculares específicos y estrategias pedagógicas flexibles y adaptadas al contexto de la comunidad Degüi.

El propósito del diseño curricular es doble y consiste en:

• Llevar adelante una propuesta de educación intercultural bilingüe, que haga posible la alfabetización inicial en el idioma propio, el reconocimiento explícito de su identidad étnica, el aprendizaje del castellano como segunda lengua y la toma de conciencia en relación a sus derechos como niños y ciudadanos bolivianos.

• Ofrecer a las niñas y niños la oportunidad de desarrollar las competencias y habilidades requeridas para poder dar continuidad a su proceso educativo, con éxito, en escuelas del sistema regular.

Juana Degüi fue concebida para un grupo reducido de alumnos, pero el éxito del modelo de escuela comunal, intercultural y bilingüe, incitó a recibir más alumnos. En la gestión 2009, se cuenta con un alumnado de 110 niños y niñas y 5 docentes. Juana Degüi fue seleccionada por el Ministerio de Educación como escuela piloto para la implementación del Diseño Curricular Regionalizado para el pueblo ayoreo en Bolivia.

El trabajo artesanal en base a fibra de garabatá


El ingreso económico por venta de artesanías cobra importancia para las familias ayoreas urbanas al apoyar en la alimentación, salud y educación para las niñas y niños, aunque presenta limitaciones como la insuficiencia de medios de producción, abastecimiento de materia prima, diversificación de la producción, canales de distribución, acceso al mercado consumidor, espacios de comercialización y justa remuneración, sólo por mencionar algunas.

Para acceder a la materia prima, el garabatá fino o dajudie, las mujeres de la comunidad Degüi viajan 35 km. a un campo de pozos petroleros conocido como la “La Peña”, pagando un alto costo por transporte, compran la fibra a otras artesanas o la reciben como obsequio desde las comunidades rurales. La comunidad Degüi no está en posibilidades de establecer cultivos de garabatá al encontrarse dentro de la mancha urbana de la ciudad.

La capacidad de producción de bolsos y artesanía es por ahora muy baja al ser una actividad discontinua en la recolección de materia prima, hilado y tejido y por que se alterna con las labores cotidianas de la casa o la recreación. En los espacios y momentos familiares de socialización hay poco incentivo a la transferencia de oficios de una generación a otra, provocando el deterioro de los conocimientos sobre las técnicas artesanales tradicionales. Actualmente otras técnicas como el macramé tienen buena aceptación y popularidad entre la población joven al ser menos laboriosas.

Las artesanas y artesanos de la comunidad desconocen los términos y espacios para la mejor comercialización de las piezas artesanales y otros productos. Gran parte de la producción se vende ambulando por las calles, mercados y ferias de la ciudad, actividad acompañada de la mendicidad, que termina por restarle valor a la pieza cuando la compra se confunde con un gesto de caridad.

Otro canal de comercialización son los intermediarios, tiendas o rescatistas, que tienen una fuerte influencia y obtienen el mayor beneficio. El precio de la artesanía ayorea se sujeta a la especulación en el mercado y fluctúa dependiendo de las condiciones en que se comercializa, la valoración que el comprador hace de la pieza y la urgencia económica de la artesana.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

La historia de los ayoréode en la ciudad de Santa Cruz


Entre 1960 – 1970, el flujo migratorio de los ayoréode hacia la ciudad aumentó y se formó un asentamiento en la ex Estación Brasilera. En este periodo surgió la imagen de los “selvícolas” como “problema social” la cual llega a su apogeo en 1979, año en que se incrementaron las iniciativas para desalojarlos de las calles y de la ciudad. Finalmente, los ayoréode fueron expulsados de la Estación Brasilera.

Con el apoyo de organizaciones de desarrollo surgió la Casa del Campesino, en la actual Avenida Cumavi. Esta casa fue concebida como un lugar de hospedaje temporal para los indígenas que necesitaban estar en la ciudad por razones justificadas, pero en ningún caso como vivienda permanente. Los ayoreode que quisieron seguir en la ciudad se asentaron en el Barrio Guaracachí, del cual fueron desalojados en 1984 por los propietarios del terreno, la Empresa Nacional de Ferrocarriles (ENFE).

Ya que en Guaracachi y la Casa del Campesino la población crecía y recrudecían los problemas internos y con los vecinos; además que la situación de loteamiento hacía prever una expulsión inminente. Fue entonces que Timi Degüi Picaneray recorrió la zona preguntando sobre un lugar donde poder asentarse junto a su familia.

Hacia 1984 – 1985 un grupo reducido de familias ayoreas se asentaron en un lote perteneciente al señor () Juan Montenegro, que finalmente fue donado [a la alcaldía]. El terreno tenía una extensión de 147 mts. X 87 mts.” (Acta de Fundación, Comunidad Indígena Ayorea Degüi, 14/12/2004).

En ese entonces, había suficiente espacio para cultivar e incluso para cazar sin alejarse mucho. Después, con la expulsión de las personas que vivían en el Barrio Guaracachi y en la Casa del Campesino, todos los ayoreode que estaban en la ciudad pasaron a vivir a Barrio Bolívar hoy conocido como Comunidad Ayorea Degüi.

Extraído de la investigación de Irene Roca, 2007, APCOB: "Los ayoréode en la ciudad, Ayoréode iji Idaidatei Santa Cruz".
Fotografía de APCOB: Casa del Campesino.

Los ayoréode


Los Ayoréode son un pueblo semi-nómada del oriente boliviano, tradicionalmente cazador y recolector. En sus inicios ocupaban extensos territorios que iban desde el norte de los bañados de Izozog hasta la región del Chaco Central. Después de la Guerra del Chaco fueron desplazados hacia otras regiones y a través de las misiones cristianas fundamentalistas fueron persuadidos para ocupar territorios en la chiquitanía boliviana.

El sentimiento de pertenencia hacia la tierra, siempre ha sido fuerte en los ayoréode, por el hecho de ser su principal fuente de subsistencia. A través del tiempo han demostrado que han sido buenos guardianes de sus recursos naturales, aunque no hayan gozado de una limitación real sobre su territorio.

Los ayoréode siguen manteniendo su sistema de parentesco, incluyendo las reglas de casamiento y la exogamia de los clanes. Existe una fuerte relación entre los grupos de familias emparentadas por lazos de sangre, llamado “Jogasui”.

Durante la época colonial y republicana, poca o nada es la información que se tiene sobre los zamucos hoy conocidos como ayoréode. La variedad de nombres que recibió este grupo cultural: pototeros, ninaguilas, motorocos, yanaíguas, flecha corta y en pelotas, dificultó la recopilación de información histográfica; y su forma de vida tradicional, la nómada, no permitió a los cronistas seguirles los pasos.

Los primeros contactos entre los ayoréode y las misiones jesuíticas surgen en la colonia a fines del siglo XVII. En 1724 se fundó la Misión San Ignacio de Zamucos la cual funcionó hasta 1745, año en que los ayoréode abandonaron la misión por incompatibilidad interna al grupo y con la visión jesuítica sobre la vida. La desestructuración de esta Misión coincidió con la expulsión de los jesuitas de la Audiencia de Charcas.

Según Fishermann los antepasados de los ayoréode que se quedaron en las misiones fueron asimilados por la cultura chiquitana, y los que se replegaron al monte recrearon su cultura nómada y continuaron con su propia religión, siendo ellos los antepasados del pueblo ayoreo que se conoce en la actualidad.

Los ayoréode que se refugiaron de la acción misional, encontrarían a mediados del siglo XX el momento inevitable de encuentro con la sociedad Boliviana, la Guerra del Chaco (1932 – 1935). La guerra y el avance de la sociedad republicana fue para los ayoréode un impedimento para que los grupos locales llamados Gosode accedieran a lugares privilegiados y claves para el abastecimiento de agua, alimentos y sal.

Al no poder competir por el territorio contra los blancos, los ayoréode empezaron a competir entre sí y las relaciones entre grupos locales Gosode pasó de conflictos pautados ritualmente a guerras de sobrevivencia. Los llamados Guidaigosode, un grupo local del sur marchó hacia el norte afectando los espacios territoriales de los Diequedejnaigosode.

A mediados de 1940, por requerimiento del gobierno nacional, misioneros católicos y evangélicos contactaron a los ayoréode y establecieron estaciones misionales. En 1948 la Misión Nuevas Tribus fundó Tobité, el primer asentamiento permanente de ayoréode en Bolivia. En 1950 la Misión Sudamericana fundó Zapocó y Rincón del Tigre. En 1957 la iglesia católica fundó Santa Teresita. Todos los demás asentamientos se formaron a partir de 1955 por migraciones desde los nuevos centros. El último grupo que aceptó la vida sedentaria y el contacto misional se asentó y fundo Puesto Paz en 1972.

Otros sucesos como la construcción del Ferrocarril Santa Cruz – Puerto Suárez, la explotación petrolera, el avance de las haciendas ganaderas y la internación de gente foránea, provocó una masiva migración en un tiempo relativamente corto, la forzada sedentarización y la pérdida del control del territorio que ocupaban los ayoréode.

Es así como se dio inicio a un rápido proceso de aculturación religiosa, social y económica, alterando el mundo simbólico ayoréode y sus creencias del pasado para introducir creencias cristianas, nuevos alimentos, una nueva educación y un nuevo sistema de trabajo.

Resumen a partir de revisión bibliografíca de Riester, Weber, Fishermann, Suaznabar, Zanardini, Solezzi y Velasco. Esta Bibliografía se encuentra en el centro de documentación de APCOB.